Cuando hablamos de limpieza energética, ¿a qué nos referimos?

Las limpiezas energéticas pueden realizarse en espacios o en las personas. Las malas vibraciones, las envidias, mal de ojo u otros ataques energéticos (sean intencionados o no), influyen negativamente en las personas y en los espacios en los que habitan.

A veces las malas energías vienen de fuera o estaban previamente en la casa. Alguien que nos tiene envidia o celos visita nuestra casa o el sentimiento es tan fuerte que nos llega. Discusiones en el hogar. Malas relaciones en la vecindad. Vivir en ambientes llenos de contaminación o con violencia social. Vivir cerca de antenas o fábricas, en zonas con pocos árboles, etc. Todas estas situaciones cargan nuestro hogar de energías negativas y hace que tengamos más cansancio, rachas de mala suerte, e incluso enfermedades.

Otras veces las malas energías tienen origen interno. Los motivos por los que tenemos bloqueos o vibramos bajito pueden ser: depresión, tristeza, baja autoestima, pensamientos negativos, envidias o duelos. Todos ellos merman nuestras energías y cargan los ambientes.

Y es que cuando vibramos bajito estamos bloqueando las energías positivas, la prosperidad y el amor. En estos casos necesitamos limpiezas y otras prácticas sanadoras (como reiki, acupuntura, radiestesia, terapia psicológica, etc.) para transmutar y desbloquear las energías, y poder desarrollarnos con plenitud en todos los planos.

Hoy os contamos cómo poder realizar limpiezas energéticas en nuestra casa y hogar.
Siempre que entremos a vivir en una casa nueva, es recomendable realizar una limpieza profunda de la misma. Durante nueve días seguidos barreremos la casa desde el interior (las habitaciones del fondo) hacia el exterior, sacando toda la suciedad de la casa traspasando la puerta de entrada. A continuación, fregaremos el suelo con agua y vinagre blanco, siguiendo el mismo orden (del interior al exterior). Si tus suelos son delicados, puedes utilizar un producto de ph neutro de aloe vera o lavanda.

Mantener el orden de tu casa, limpiar y ordenar espacios y armarios permite mover las energías estancadas. Todo lo que no uses desde hace tiempo o está roto, sácalo de la casa. Lo que sirva, regálo, el resto tíralo reciclando todo lo que puedas.

Las plantas son nuestras aliadas. Tener aloe vera en las puertas y ventanas nos protege energéticamente. También la ruda, el romero y la lavanda son sumamente protectores. Si las plantas de tu casa no crecen bien, quizá sean señal de algún tipo de energía negativa en el hogar.

En la puerta de entrada puedes colgar amuletos para potenciar la protección, como un Tetragrámaton, ángeles de la guarda o cualquier símbolo que sientas que te protege.

Las gemas y minerales ayudan a absorber las malas energías. Amatistas, turmalinas, obsidianas y cuarzos son algunas de las que puedes colocar en rincones estratégicos de tu casa (la entrada, la mesilla de noche).

Además, las velas y los inciensos sirven como canalizadores de energía positiva. El palo santo y copal, los atados de salvia y hierbas como romero, lavanda o ruda, nos permiten sahumar espacios y realizar limpiezas energéticas fuertes en el hogar. Para ello iremos por todas las estancias haciendo círculos, poniendo especial énfasis en los rincones o habitaciones más interiores o que tengan menos ventilación, así como en las esquinas y zonas de agua estancada (como los baños).

En fechas especiales, es recomendable hacer también limpiezas energéticas, para potenciar las energías para el nuevo ciclo. Nos referimos a inicio de año, cumpleaños, solsticios y equinoccios, y cualquier otra fecha que sea importante para ti. También es buenos realizarlas cuando has tenido alguna noticia triste, así evitas que se cargue el ambiente y contribuyes a tu sanación interior.

En Tarodeca encontrarás una amplia gama de inciensos aromáticos y de palo santo y copal; velas con intención energética. También tenemos una amplia gama de productos específicos para realizar limpiezas energéticas como palo santo, salvia blanca y azul, atados de hierbas, productos de defumación activa para sahumar (pirámides, bombitas y triángulos), entre otros.